Dirigentes resaltan la lucha por la soberanía argentina sobre las islas Malvinas

Télam

A través de las redes sociales, diferentes sectores políticos reafirmaron la importancia de sostener las políticas de Estado para mantener el reclamo sobre esa parte del territorio argentino.

Se conmemora en la fecha el 192º aniversario de la creación de la Comandancia Política y Militar en las Malvinas.Se conmemora en la fecha el 192º aniversario de la creación de la Comandancia Política y Militar en las Malvinas.


Ministros y dirigentes de diferentes sectores políticos reafirmaron este jueves, a través de las redes sociales, el derecho de soberanía argentina sobre las islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur y los espacios marítimos circundantes, así como también la importancia de sostener las políticas de Estado para mantener el reclamo sobre esa parte del territorio argentino.

Así lo afirmaron a través de publicaciones en la red Twitter y en mensajes al conmemorarse el Día de la afirmación de los derechos argentinos sobre las islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur, y los espacios marítimos circundantes.

«Hay un grito de soberanía», dijo el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, al encabezar este jueves un acto en el que se anunciaron obras viales, y agregó que ese llamado «es ni más ni menos que la recuperación pacífica y diplomática de la soberanía».

«Ese va a seguir siendo nuestro reclamo y nuestra bandera», advirtió el ministro coordinador respecto a la defensa de la soberanía argentina sobre las islas ante el Reino Unido, que las usurpó en 1833 .

«Creemos y confiamos en avanzar en los diálogos constructivos más allá de la cantidad de jurisprudencia internacional que se fue acumulando en todos estos años sobre la necesidad de encontrar una solución pacífica y que la Argentina recupere la soberanía sobre nuestras islas», indicó también.

El ministro de Defensa, Agustín Rossi, por su parte recordó que no hay que perder de vista que las Malvinas significan para el Reino Unido, en su calidad de «potencia militar extranjera» un lugar de «importancia geopolítica» y por ese motivo es para ellos «un enclave militar».

Su interés va incluso «mucho más allá de la potencialidad en pesca e hidrocarburos», agregó Rossi.

Por su parte, el secretario de Malvinas, Antártida y Atlántico Sur, Daniel Filmus, señaló: «Este 10 de junio, nos comprometemos a seguir trabajando para construir políticas de Estado tendientes recuperar el ejercicio de soberanía sobre nuestras Islas Malvinas».

A su turno, el ministro de Justicia, Martín Soria, sostuvo que «la causa de las Islas Malvinas es patrimonio de todo el pueblo argentino, que sostiene el reclamo de soberanía sobre ese territorio nacional con dignidad y respeto a los derechos humanos, la justicia y la verdad».

«No hay más lugar para colonialismos», sentenció Soria en su cuenta de Twitter.

También la mandataria de Santa Cruz, Alicia Kirchner, escribió: «En otro 10 de junio especial, reafirmamos nuestra soberanía y nuestros derechos sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur y los espacios marítimos circundantes. Las Malvinas son argentinas. Ayer, hoy y siempre», remató.

El recuerdo de un día especial para el país en su lucha por la soberanía de las Malvinas también incluyó al expresidente de Bolivia Evo Morales, quien publicó: «Manifestamos nuestro apoyo al hermano pueblo argentino en su reivindicación. Desde Bolivia decimos Malvinas Argentinas y Mar para Bolivia».

También el intendente de Lanús, Néstor Grindetti (PRO), se refirió a la guerra de Malvinas al manifestar: «Mi recuerdo y apoyo para cada excombatiente y familiares de cada uno de ellos».

«Tengamos siempre presente que las Malvinas fueron, son y serán Argentinas», agregó el jefe comunal.

Además, la diputada de Juntos por el Cambio Graciela Ocaña recordó la fecha alusiva y aseguró: «Seguimos ratificando el reclamo de soberanía. Hoy y siempre Malvinas Argentinas», remarcó.

También, la senadora nacional por Córdoba Laura Rodríguez Machado (Juntos por el Cambio) publicó una imagen de las islas y agregó: «Día de la afirmación de los derechos argentinos sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur, y los espacios marítimos circundantes».

«No existe dinero que pueda comprar el sentimiento de ser veterano de Malvinas»

Télam

David Alfredo Díaz, santiagueño y excombatiente, enfatiza que «es un orgullo ser argentino y veterano de Malvinas» y recuerda: «sólo cuando pude regresar mi familia se enteró que estaba vivo».

David Alfredo Díaz es un santiagueño que nunca había salido de su pago, menos había subido en un avión y, sin saberlo, a los 18 años llegó a la Guerra del Atlántico SurDavid Alfredo Díaz es un santiagueño que nunca había salido de su pago, menos había subido en un avión y, sin saberlo, a los 18 años llegó a la Guerra del Atlántico Sur

David Alfredo Díaz es un santiagueño que nunca había salido de su pago, menos había subido en un avión y, sin saberlo, a los 18 años llegó a la Guerra del Atlántico Sur, conflicto que para él comenzó cuando -revivió en diálogo con Télam- por los parlantes del avión resonó una voz que decía: «Bueno, señores, a preparase, que vamos a aterrizar y les comunicamos que venimos a hacer Patria. ¡Estamos en las islas Malvinas!».

Díaz, actualmente de 58 años, recordó que en ese instante, tras escuchar el mensaje del altavoz, los que estaban en el avión cerca suyo se miraron «sorprendidos».

«Es un orgullo ser argentino y veterano de Malvinas», agregó el santiagueño, quien encabeza el Centro de Excombatientes de su provincia y también es presidente de la Comisión Nacional de Excombatientes de Malvinas, lo que para él significa «un gran orgullo» porque permite «escuchar y buscar soluciones» para los veteranos.

«Hoy se ve el reconocimiento en todos lados hacia los que luchamos», manifestó y contó haber tenido la experiencia de ir caminando y alguien lo pare y le pregunte cosas, al enterarse de su participación en la guerra de Malvinas.

«A veces nos paran y nos preguntan cosas, nos dan un abrazo o nos dicen gracias por permitirles conocer a héroes, eso nos llena de orgullo», reveló.

«A veces nos paran y nos preguntan cosas, nos dan un abrazo o nos dicen gracias por permitirles conocer a héroes, eso nos llena de orgullo»

Sin embargo, en junio de 1982, al regresar al territorio continental, las sensaciones fueron muy distintas, ya que en ese momento las autoridades de las Fuerzas Armadas les ordenaron, recordó Díaz, «no hablar con nadie, bajo ningún concepto» sobre lo vivido durante el conflicto en las islas, algo que «estaba prohibido».

«Éramos 1.053 que habíamos regresado, después nos dieron licencia por 30 días, volvimos al Servicio Militar, hasta que en noviembre nos dieron la baja», relató y luego completó su experiencia de aquel año 1982: «Sólo cuando pude regresar a Santiago del Estero, en una madrugada fue, recién mi familia se enteró que estaba vivo».

Su vida siguió entonces, como la de muchos jóvenes, con la búsqueda de un empleo: «Cuando regresé a mi provincia empecé a buscar trabajo, no puedo decir que tuve mala o buena suerte, pero por suerte pude conseguir uno, sin embargo otros compañeros cuando regresaron se sintieron mal y les era muy difícil conseguir», reconstruyó.

"Éramos 1.053 que habíamos regresado, después nos dieron licencia por 30 días, volvimos al Servicio Militar, hasta que en noviembre nos dieron la baja"«Éramos 1.053 que habíamos regresado, después nos dieron licencia por 30 días, volvimos al Servicio Militar, hasta que en noviembre nos dieron la baja»

Díaz, al referirse a la historia del Centro de Excombatientes de Santiago del Estero, afirmó que en un primero momento «mucha gente no nos creía lo que habíamos vivido» mientras que tanto él como sus compañeros tenían «muchas ganas de expresar» lo que habían experimentado en Malvinas, y sobre ese punto remarcó que «hablar es una forma de expresar vivencias y algo que hace bien».

Díaz no pudo terminar la secundaria en su adolescencia, a los 40 años ingresó a la escuela y pudo finalizar sus estudios a los 43, «una materia pendiente que tenía».

A los 18 años, mientras hacía el Servicio Militar Obligatorio en Córdoba, «una mañana nos formaron en la plaza de armas y nos dijeron que las Malvinas habían sido recuperadas», relató, y entonces empezaron a darles equipos para hacer maniobras y prácticas de tiro, hasta que, continuó, «vino una orden y nos dijeron que íbamos a ir a la zona sur, a hacer maniobras».

«Una mañana nos formaron en la plaza de armas y nos dijeron que las Malvinas habían sido recuperadas»

«Y cuando uno tiene 18 años piensa de otra forma, creía que íbamos a conocer otros lugares, a esa edad uno tiene como un espíritu aventurero», repasó para reconstruir lo que sentía en aquel momento -algo semejante a una mezcla de curiosidad y euforia- que luego se transformó en una sensación de «perder la noción del tiempo».

«A mí me tocó el Servicio de Sanidad, estaba como camillero y entonces preparamos todo el equipamiento, el botiquín, y todo lo que pensábamos que era necesario, porque nos dijeron que íbamos de maniobras al sur», se remontó en los recuerdos.

Y luego siguió: «Empezó el viaje, nunca habíamos subido a un avión y en un momento por los altos parlantes nos enteramos que estábamos aterrizando en Malvinas: todos nos sorprendimos, porque no sabíamos nada de Malvinas, solo lo que leíamos en los libros».

«Todo era un trabajo normal, hasta que llegó el 1° de mayo (de 1982), en el que nuestras vidas tuvieron un giro de 180 grados. Ahí supimos lo que es una guerra, porque había dos moles de acero (aviones) que nos tiraban bombas. En ese momento surgió el instinto por sobrevivir y eso te lleva a hacer cosas que jamás pensaste hacer», transmitió Díaz.

Sobre ese tipo de experiencia o situaciones límite, agregó: «El miedo te hace sobrevivir, quien dice que no tuvo miedo no estuvo nunca en Malvinas, es una gran realidad; todos tuvimos miedo y el miedo nos llevó a hacer cosas increíbles pero, bueno, nuestra convicción era cumplir con la Patria».

A los 18 años, mientras hacía el Servicio Militar Obligatorio en Córdoba, "una mañana nos formaron en la plaza de armas y nos dijeron que las Malvinas habían sido recuperadas"A los 18 años, mientras hacía el Servicio Militar Obligatorio en Córdoba, «una mañana nos formaron en la plaza de armas y nos dijeron que las Malvinas habían sido recuperadas»

La función de Díaz, como camillero, se estrenó ese 1° de mayo: «Nunca pensé ver y hacer lo que hice, juntar a los heridos y muertos, algunos mutilados, una escena muy triste».

«Son cosas que te marcan, después de ver a los compañeros así no pude comer por tres días y perdí el apetito», recordó sin disimular la tristeza.

«El miedo te hace sobrevivir, quien dice que no tuvo miedo no estuvo nunca en Malvinas, es una gran realidad; todos tuvimos miedo y el miedo nos llevó a hacer cosas increíbles pero, bueno, nuestra convicción era cumplir con la Patria»

En los días que siguieron, agregó, la tarea de levantar heridos y muertos mientras esquivaba bombardeos se fue convirtiendo en «un trabajo normal».

La experiencia como prisionero y su reflexión sobre la guerra
«Los últimos días de lucha fueron del 26 al 29 de mayo, en los que combatimos sin parar, las 24 horas del día. No había descanso, nos quedamos sin municiones, hasta que caemos (ante los británicos) el 30 de mayo», relató.

Y entonces añadió: «Quedamos prisioneros, nos pusieron (a los soldados argentinos desarmados) en una cámara frigorífica y uno no sabía qué iban a hacer con nosotros, hasta que después nos pusieron en un barco y así hasta que nos dejaron en libertad, el 14 de junio a la noche, y en la madrugada del 15 de junio, en que nos dejaron en Uruguay».

"Son cosas que te marcan, después de ver a los compañeros así no pude comer por tres días y perdí el apetito"«Son cosas que te marcan, después de ver a los compañeros así no pude comer por tres días y perdí el apetito»
Sobre su experiencia de la guerra, tanto en lo personal como en la vivencia compartida con otros, respondió: «La guerra nunca es buena, para ninguno de los bandos, pero yo me siento orgulloso de haber aprendido muchos valores, especialmente de amistad, de solidaridad, de valorar un plato de comida», aseguró.

El día que me toque no estar en la tierra, no me llevo nada pero a mis hijos les dejo el orgullo de ser veterano de guerra, de llevar a la Patria dentro de mí»

«El día que me toque no estar en la tierra, no me llevo nada pero a mis hijos les dejo el orgullo de ser veterano de guerra, de llevar a la Patria dentro de mí», manifestó Díaz y en ese sentido destacó: «No me siento más patriota de nadie, pero es un orgullo que te llena el pecho».

«Cuando cantamos el himno, o cuando en un acto vemos desfilar a los compañeros, a veces se nos pianta una lágrima, es una mezcla de alegría y nostalgia», se confesó y finalmente comentó que se siente orgullo de haber vestido «el uniforme de San Martín para defender la bandera de Belgrano».

«No existe dinero en el mundo que pueda comprar ese sentimiento, por eso es un orgullo ser argentino y veterano de Malvinas», recalcó.

Colocaron en colectivos fotos de 15 caídos en Malvinas a modo de «homenaje permanente»

17/06/2021 19:17 – MEMORIA HISTÓRICA

Telam

La iniciativa se enmarca en la puesta en marcha de la Ordenanza 11880 «Rostros de Malvinas», que el Centro de ex Combatientes Islas Malvinas (Cecim) lleva adelante junto a la Subsecretaria de Transporte bonaerense. AddThis Sharing Buttons

Unos 350 colectivos de corta distancia, a partir de hoy llevarán en sus unidades vinilos con los rostros.Unos 350 colectivos de corta distancia, a partir de hoy llevarán en sus unidades vinilos con los rostros.

"Ellos son los únicos héroes de la Guerra, nuestros compañeros que entregaron la vida sin pedir nada a cambio" evocaron sus compañeros del Cecim. «Ellos son los únicos héroes de la Guerra, nuestros compañeros que entregaron la vida sin pedir nada a cambio» evocaron sus compañeros del Cecim.

"Detrás de cada foto hay un ser humano al que la guerra le truncó sus sueños de vida, sus expectativas" dijo Hugo Robert, Vicepresidente del Cecim-La Plata. , vi«Detrás de cada foto hay un ser humano al que la guerra le truncó sus sueños de vida, sus expectativas» dijo Hugo Robert, Vicepresidente del Cecim-La Plata. , vi

Los rostros de 15 excombatientes caídos en la Guerra de Malvinas, oriundos de la capital bonaerense, fueron colocados este jueves en unos 350 colectivos que recorren a diario la capital bonaerense en un «homenaje permanente» que permite recuperarlos «más vivos que nunca», según destacaron desde el Centro de ex Combatientes Islas Malvinas (Cecim La Plata).

La iniciativa se enmarca en la puesta en marcha de la Ordenanza 11880 «Rostros de Malvinas», que el Cecim lleva adelante junto a la Subsecretaria de Transporte bonaerense y se realizó esta tarde en la Plaza Islas Malvinas de La Plata, un lugar muy simbólico para los exsoldados ya que allí se levantó un monumento y un centro cultural en la casona del ex Regimiento 7 de Infantería que funcionó en ese predio y fue desde donde, en 1982, partieron miles de conscriptos a la Guerra de Malvinas.

El vicepresidente del Cecim La Plata, Hugo Robert, explicó a Télam que «todos los homenajes son válidos y este tiene la posibilidad de ser un homenaje permanente porque al estar circulando los colectivos, los rostros de los compañeros van a estar más vivos que nunca».

«Queremos visibilizar esos rostros que quedaron fotografiados a sus jóvenes 18, 19 y 20 años»

La iniciativa busca interpelar a los platenses acerca de qué se está haciendo por aquellos jóvenes. La iniciativa busca interpelar a los platenses acerca de qué se está haciendo por aquellos jóvenes.

«Queremos visibilizar esos rostros que quedaron fotografiados a sus jóvenes 18, 19 y 20 años, que es la edad que tenían cuando fueron a Malvinas», destacó.

Consideró que además la colocación de esos rostros «busca la interpelación a los platenses, preguntarnos qué estamos haciendo por los pibes, los muchachos que con sus jóvenes años entregaron lo más preciado de un ser humano».

«Sabemos, lo sentimos, que el futuro será recuperar los territorios usurpados, pero somos los argentinos los que tenemos que proponer acortar ese tiempo y estos 15 rostros interpelan a toda la sociedad sobre lo que hicimos y lo que nos falta hacer para esa tarea que es de todos los argentinos», afirmó.

Hugo Robert, explicó a Télam que "todos los homenajes son válidos y este tiene la posibilidad de ser un homenaje permanenteHugo Robert, explicó a Télam que «todos los homenajes son válidos y este tiene la posibilidad de ser un homenaje permanente

Insistió que «detrás de cada foto hay un ser humano al que la guerra le truncó sus sueños de vida, sus expectativas».

«Ellos son los únicos héroes de la Guerra, nuestros compañeros que entregaron la vida sin pedir nada a cambio, es poner en palabras lo que ya no pueden decir, pelearon por la soberanía nacional», dijo con emoción.

Unos 350 colectivos de corta distancia, llevarán en sus unidades vinilos con los rostros de Miguel Angel Arrascaeta, Angel Benítez, Omar Aníbal Brito, Sergio Alberto Carballido, José Luis Del Hierro, Alfredo Gattoni, Guillermo Ernesto Granado, Rolando Máximo Pacholczuk, Dante Luis Segundo Pereira, José Luis Rodriguez, Enrique Horacio Ronconi, Carlos Mosto, Ignacio María Indino, Mario Gustavo Rodríguez y Marcelo Daniel Massad.

La presentación de la cartelería se llevó a cabo en el monumento de Plaza Islas Malvinas y contó con la presencia del presidente del Cecim, Rodolfo Carrizo; los representantes de las firmas transportistas, Nicolás Corbelli y Walter Mastropietro; además de ediles platenses y funcionarios y funcionarias provinciales y del Gobierno nacional.

La iniciativa se puso en marcha este jueves, en la Plaza Islas Malvinas de La PlataLa iniciativa se puso en marcha este jueves, en la Plaza Islas Malvinas de La Plata

Durante la alocución, el subsecretario de Transporte, Alejo Supply, expresó que «el reclamo por la soberanía de las Islas tiene que ser permanente, como lo hizo nuestro espacio político desde un primer momento: primero con Néstor Kirchner y luego con Cristina» Fernández de Kirchner.

«Esta iniciativa nos permite recordar a nuestros héroes en cualquier momento, porque la causa Malvinas no tiene días ni horarios», remarcó.

El subsecretario destacó que «es importante saber de dónde venimos para pensar la cuestión Malvinas a futuro, para que las nuevas generaciones se apropien de esta causa y lleven la bandera con el paso de los años».

En el acto realizado este jueves en La Plata también estuvieron presentes la diputada provincial, Florencia Saintout; el legislador bonaerense Guillermo Escudero; el subsecretario de Participación Ciudadana del ministerio de Seguridad, Pablo Fernández; el titular de la Comisión Nacional de Regulación del Transporte, José Ramón Arteaga; Lucía Iañez, directora provincial de Acceso a la Justicia; y excombatientes y familiares.

El caído que combatió con un fusil que no disparaba es uno de los rostros que viajan en colectivo

Rolando Máximo Pacholczuk combatió hasta el final de la Guerra de Malvinas con un fusil que no disparaba, sus superiores nunca le proveyeron de otra arma y cayó en combate durante la contienda bélica con Gran Bretaña de 1982.

Ahora, el rostro de Rolando, al igual que otros 14 soldados oriundos de La Plata que no pudieron volver a casa tras el conflicto del Atlántico Sur, desde hoy están retratados en las carrocerías de los colectivos que circulan por las calles de la capital bonaerense.

«Entre tantas atrocidades que cometió la dictadura en Malvinas está el haber dejado a un soldado frente a un enemigo todopoderoso como los británicos con un fusil que nunca disparó, desde la primera prueba de tiro estuvo inutilizado», recordó a Télam el vicepresidente del Centro de Excombatientes Islas Malvinas (Cecim) de La Plata, Hugo Robert.

Pacholczuk era compañero de trinchera de Robert y murió el 16 de junio de 1982, cuando era trasladado a continente muy malherido a bordo del buque hospital Almirante Irízar, tras portar un arma que no disparaba.

«Yo acompañé a Rolando a avisar a los superiores que el fusil no disparaba, los superiores lo sabían y nunca lo evacuaron, si no le podían dar otra arma debieron haberlo sacado de la línea de fuego», sostuvo el vicepresidente del Cecim.

El fusil de Rolando nunca disparó. El arma no funcionaba y aun así debió portarla durante todo el conflicto de Malvinas, hasta el 14 de junio de 1982.

«A Rolando lo hieren en el último repliegue, cuando faltaba poco para llegar al puesto comando que era el punto en el que debíamos encontrarnos en el repliegue. En los últimos metros éramos 3 los que veníamos: Héctor Correia, Rolando y yo. Estaba oscuro, era de noche, y no veíamos dónde estaba el puesto», recordó Robert.

Tras discutir sobre el camino más rápido para llegar, Correia y Rolando decidieron seguir un camino y Hugo otro.

«Ellos terminaron cruzándose con un río de piedras filosas que complicaban el paso; yo llegué primero porque acerté el camino, fue instinto, fue cara o ceca», dijo con pesar. Recordó que «ese repliegue fue dantesco, con las bengalas que tiraban los ingleses para iluminar la escena de combate».

«Iba a continuar el repliegue cuando me avisan que llegaban ellos, y ahí lo veo al «Chueco» Correia que llega aturdido por un bombazo que lo deja sordo, de hecho quedó con dificultades en un oído. Y a Rolando las esquirlas le pegan en la espalda, se la barren», rememoró Robert.

Cuatro compañeros cargaron a Rolando en una lona para llevarlo hasta la posta, y el referente del Cecim afirmó: «Cuando cuentan la de Rambo, los cañonazos, yo pienso en que había que volver sobre sus pasos para ir a buscar a un compañero herido».

Y agregó: «Combatiendo hicimos lo que pudimos, pero en el medio del feroz bombardeo había que volver a buscar a un compañero».

Rolando estaba consciente, muy adolorido. Y finalmente murió cuando era trasladado en el Irízar, a raíz de una infección generalizada producida por las esquirlas alojadas en su espalda.

«Lo que hicieron con Rolando fue un delito, no se pudo tipificar como delito de lesa humanidad pero fue delito y como acción criminal ya está prescripta», lamentó.

El excombatiente dijo «el teniente primero García, que era el jefe de la Compañia , entre tantas perlas como las de haberse retirado del combate antes que sus soldados, debe cargar en su conciencia con esto, él sabe que en el frente hubo un soldado que estuvo toda la guerra con un fusil que no disparaba, me encantaría saber por qué nunca lo evacuaron o le consiguieron un fusil que disparase»

«No nos conocíamos de antes de la guerra, fue mi compañero de trinchera y mi amigo de Malvinas, y voy a llevar siempre esa amistad, la alegría de recibir una carta o conseguir un poco de comida, y me llevo su sonrisa generosa y ese vozarrón que tenía. Es un tipo que llevo conmigo todos los días», dijo emocionado.

Banderas de Macha y Ayohuma, las banderas argentinas más antiguas que se conserva

Pertenecieron al ejército que hizo la campaña del Alto Perú en noviembre de 1813 al mando del General Manuel Belgrano. En 1883, el padre Martín Castro, en Titiri quiso sacar dos telas enrolladas que rodeaban unos cuadros. Las telas, de color celeste y blanca, resultaron ser banderas. Así comienza la historia de una de las piezas más importantes del Museo Nacional de Historia.

La “Bandera de Macha” fue encontrada en 1885 en la capilla de Titiri de Macha (Bolivia) -lugar cercano donde tuvo asiento el cuartel general del ejército patriota comandado por Belgrano-, detrás de unos cuadros antiguos. Junto a esta bandera, fue encontrada otra -la “Bandera de Ayohuma”- cuyos colores azul, blanco y azul, fue entregada por el Gobierno de Bolivia y actualmente se conserva en el Museo Histórico Nacional de la ciudad de Buenos Aires. En Titiri, Manuel Belgrano montó su cuartel general tras la batalla de Vilcapugio. Según los indígenas de la zona a quienes se consultó luego del hallazgo, fue el cura Juan de Dios Aranívar, amigo de Belgrano, quien escondió las banderas tras la retirada del ejército revolucionario. Por su gran tamaño, se supone que las banderas encontradas no se llevaban a la batalla, sino que quedaban fijas como banderas de artillería o para indicar el lugar de reunión de los ejércitos.

Desde 1896, el Museo Histórico Nacional conserva una de esas banderas: la que tiene los colores ordenados como la actual bandera nacional. La otra, blanca celeste blanca, está en el Museo Casa de la Libertad de Sucre. Que los colores estuvieran en distinto lugar es una muestra de que lo que importaba eran los colores para que los ejércitos pudieran identificarse.

Historia y recorridos de las banderas

Manuel Belgrano enarboló por primera vez esta bandera a orillas del Río Paraná el 27 de febrero de 1812, convencido de la necesidad de enarbolar una bandera propia tomando los colores de la escarapela. Hasta entonces las tropas habían combatido con la bandera del enemigo.

Luego de ganar en Salta, es derrotado por las tropas españolas en Vilcapugio y es en el pueblo de Macha –hoy Bolivia- donde reorganiza al ejército. El 14 de noviembre de 1813 es derrotado en Ayohuma y no consta ninguna documentación en España ni en América que nuestras banderas fueran tomadas como trofeo por los realistas.

La Bandera Macha, hoy es exhibida en la ciudad boliviana de Sucre, en una de las salas del Museo “Casa de la Libertad” de Sucre —custodiada por los restos de Juana Azurduy-.

A comienzos del 2012 —año del Bicentenario de la creación de la bandera—, el gobierno de Bolivia entregó al Congreso de la Nación una réplica autenticada de la “Bandera de Macha” que llegó a la ciudad de Rosario el 27 de febrero para ser depositada en el Monumento Nacional a la Bandera.

El acto se realizó en el Salón Illia de la Cámara Alta, y fue encabezado por el canciller argentino Héctor Timerman, la embajadora de Bolivia, María Leonor Arauco Lemaitre; el autor de la iniciativa, el senador santafesino Rubén Giustiniani; y el presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores, Daniel Filmus.

Las gestiones fueron iniciadas en junio de 2010 por el senador nacional Rubén Giustiniani con la República de Bolivia para que el Museo “Casa de la Libertad” de Sucre -en donde actualmente se conserva “la Bandera de Macha” custodiada por los restos de Juana Azurduy- realizara una réplica autenticada y entregara a nuestro

Fueron encontradas en 1883 en una capilla de la actual Bolivia y se cree que acompañaron a Manuel Belgrano en la campaña del Norte. Sobre ellas y su valor patrimonial, dialogamos con Viviana Mallol, magíster en Historia del Arte Argentino y Latinoamericano y coordinadora técnica del Museo Histórico Nacional.

Las dos banderas de Macha han generado largas discusiones entre los historiadores. Hay quienes se las atribuyen a Manuel Belgrano y creen que ambas lo acompañaron en la campaña del Norte —es más, algunos creen que una de ellas fue la primera bandera que izó a orillas del Paraná—. Otros, como el Instituto Nacional Belgraniano, afirman que la documentación con que se cuenta no es suficiente para tal atribución, aunque no descartan esa posibilidad.A pesar de las opiniones divididas, es indudable que las dos banderas así llamadas flamearon en tiempos de guerra en que América soñaba con la libertad y hoy ambos paños son un símbolo de la emancipación americana.

Esta bandera, fue confeccionada por María Catalina Echevarría de Vidal hija de inmigrantes vascos que forma parte de la historia argentina por un simple giro del destino.

La amistad que unía a Belgrano con Vicente Anastasio de Echevarría, hermano de María Catalina y hombre de activa participación política en la época, permitió que el creador de la bandera aceptara alojarse en la casa familiar de los Echevarría, en la por entonces Villa del Rosario, a donde fue enviado para contener el avance de los realistas.

La necesidad de tener un símbolo distintivo para su ejército, decidió a Belgrano a pedir la colaboración de la mujer para su confección. El 20 de febrero deslizó la idea en una charla privada. Ella aceptó encargarse de la tarea de inmediato.

“Siendo preciso enarbolar bandera y no teniéndola, la mandé hacer blanca y celeste conforme los colores de la escarapela nacional”, explicaría Belgrano al Triunvirato, que desaprobó la decisión.

Doscientos años después de aquella gesta, una placa colocada en el pasaje Juramento, a metros del Monumento Nacional a la Bandera, se convirtió en el primer recuerdo formal que se le tributa a Echevarría de Vidal en su ciudad natal.

Dos banderas 

Las banderas de Macha son dos y fueron encontradas en un mismo lugar: enrrolladas detrás de unos cuadros de santa Teresa al lado del altar mayor en una capilla de TitiriMacha (actual Bolivia) en 1885 y por ello se las conoce con ese nombre. Pero tienen sus diferencias.

Bandera de Macha o bandera B

Es una bandera con tres franjas y mide 2,25 m por 1,60 m. Por mucho tiempo hubo una confusión: se pensó que sus franjas eran una roja superior, una celeste central y una roja inferior, pero se ha demostrado que el rojo correspondía a la envoltura o funda en que se guardaba, producto de una decoloración. En verdad, es una bandera con tres franjas: una superior blanca, una celeste central y una inferior blanca.

Hoy se encuentra en la ciudad boliviana de Sucre, en el Museo Casa de la Libertad. En 2016 fue restaurada por un equipo de profesionales argentinos y bolivianos.

Bandera de Ayohuma o bandera A

Es una bandera de seda con tres franjas de igual ancho: una superior celeste, una blanca central sin sol y una inferior celeste. Mide aproximadamente 2,32 m de largo por 1,53 m de alto. Toma su nombre de la batalla de Ayohuma, donde Belgrano fue derrotado por las fuerzas realistas al mando del general Joaquín de la Pezuela. Desde 1896 forma parte del patrimonio del Museo Histórico Nacional.

Fue restaurada por especialistas argentinos por un período de dos años, de 2007 a 2009. “La tela, desde ya, presenta ciertos deterioros: agujeros, roturas y rasgaduras, que han podido ser restauradas con todos los criterios de conservación. Esto ocurrió en junio del año 2007. Fueron dos años de restauración para poder estabilizar el textil teniendo en cuenta todos los criterios de mínima intervención, reversibilidad y utilizar materiales estables para consolidarlo”, comentó Viviana Mallol, magíster en Historia del Arte Argentino y Latinoamericano y coordinadora técnica del museo.

Bibliografía:

Artículo: “Llegó a la Argentina la bandera de Belgrano y será trasladada a Rosario el 27 de febrero” , Diario Clarín (Web)

Artículo: “Recuerdan a la mujer que cosió la primera bandera para Belgrano”, Diario Clarín (Web)

Artículo: “La Bandera de Macha NUESTRA PRIMERA BANDERA”, Fundación del Bicentenario (Web)¡

Las dos banderas fuente: Educ.ar.

Así se anunció la recuperación “exitosa” de las Malvinas el 2 de abril de 1982

Fue el primero de los comunicados de la Junta Militar, que se convertirían en la versión oficial del conflicto.

La mañana del viernes 2 de abril de 1982, los argentinos amanecieron con la noticia de que la Junta Militar había “recuperado las Islas Malvinas”.

Las ediciones de los principales diarios del país ya anticipaban el desembarco. Y por esas primeras horas del día se pudo escuchar el Comunicado N° 1 del “Órgano Supremo del Estado” anunciando la noticia.

Desde hacía varios días, los diarios de la época venían reflejando una creciente tensión en torno a las islas, a partir de un conflicto con el Reino Unido cuando unos operarios e infantes izaron una bandera argentina en las Islas Georgias, hecho que después se conoció como “Operación Georgias”.

Aquella mañana del 2 de abril, en el Comunicado Número 1 se escucharon primero unas líneas del Himno a las Malvinas en todas las emisoras de la cadena nacional de radio y televisión: “Tras su manto de neblinas, no las hemos de olvidar”. Luego irrumpió la característica voz que anunciaba que “LA1 Radio Nacional Buenos Aires Argentina y LS82 Canal 7 Argentina Televisora Color ” transmitía directamente desde Casa de Gobierno el Comunicado N°1 que anunciaba la “recuperación” de las islas.

“La Junta Militar, como órgano supremo del Estado, comunica al pueblo de la Nación Argentina, que hoy la República por intermedio de sus Fuerzas Armadas, mediante la concreción exitosa de una operación conjunta ha recuperado las Islas Malvinas, Georgias y Sándwich del Sur para el patrimonio nacional“, fueron las palabras que resonaron en cada hogar argentino.

La voz del locutor en off convocaba a la ciudadanía a acompañar con “responsabilidad y esfuerzo colectivo” para “convertir en realidad un legítimo derecho del pueblo argentino postergado paciente y prudentemente casi 150 años”.

A media mañana de aquel viernes, miles de ciudadanos comenzaron a agruparse en Plaza de Mayo. Cerca del mediodía, el presidente de facto Leopoldo Fortunato Galtieri se asomó al histórico balcón de la Casa Rosada. Su discurso fue emitido por el noticiero de ATC llamado “60 Minutos”.

En el mismo lugar donde apenas tres días atrás la Junta había sido repudiada en una manifestación convocada por la CGT “Brasil”, que conducía Saúl Ubaldini, Galtieri era ovacionado al grito de “Viva la patria”.

Hoy 2 de abril recién hemos comenzado con la actitud de recuperar las Malvinas y toda su zona de influencia y ya flamea la bandera Argentina en nuestras islas”, decía Galtieri ante una plaza colmada.

El Comunicado N° 2 de la Junta, también el 2 de abril, anunciaba que las Fuerzas Armadas “se hayan empeñadas en combate para alcanzar el objetivo señalado”.

Las segundas ediciones de los diarios ya se hacían eco del trascendente hecho y daban cuenta del avance de las “tropas argentinas” en las islas.

Los comunicados de la Junta Militar se convertirían en la versión oficial de la guerra y ayudaron a construir la idea del “vamos ganando”.

Hasta que el 15 de junio, el último comunicado del Estado Mayor Conjunto, el número 165, se informó del fin de las hostilidades, sin utilizar la palabra “rendición”: “En el día de ayer, 14 de junio de 1982, se produjo la reunión entre el comandante de las fuerzas inglesas, Jeremy Moore, y el comandante de la guarnición militar Malvinas, General de Brigada Mario Benjamín Menéndez. En dicha reunión se labró un acta, en la cual se establecen las condiciones de cese de fuego y retiro de tropas”.